Capítulo 6: Laher



Capítulo 6: Laher

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Pin de rolando cruz en Arqueras | Guerrera de fantasía
— ¡Jutsu de Invocación y Posesión de Sombra! —gritó Masamune justo al verla, haciendo veloces posiciones de manos.
Laher, logró sacar el arco y retroceder con un veloz salto, sin embargo, un clon ninja se movió velozmente hasta ella y antes de que pudiera si quiera notarlo, se paró sobre su sombra, deteniéndola drásticamente.
No sabía que estaba pasando con exactitud, pero era seguro que la había atrapado, por lo que recurrió a pedir ayuda.
[Alerta: haz sido atrapada por una habilidad de parálisis, la retención de movimiento impide la utilización de magia, los sistemas de comunicación y habilidades más allá de las de procedencia mental.]
— Eso es, la tienes, vamos a torturarla. —dijo emocionada y con su tono sensual Anubis.
No obstante, él planeaba deshacerse de ella de la forma más rápida y sencilla, por lo que tomó su Katana y se acercó rápidamente, dispuesto a terminarla en un ataque.
Súbitamente, antes de tocarla su cuerpo se transformó en una niebla grisácea y la atravesó. Ella no estaba asustada, su rostro se mantuvo inexpresivo, intrigando a Anubis, aunque más le intrigaba su compañero.
Al retomar su corpórea forma, guardó su Katana y caminó hasta estar justo frente a ella.
— ¿Por qué te detuviste? —preguntó intrigada Anubis.
— Me dejé llevar y olvidé donde estamos… No voy a empezar una disputa innecesaria contra ella. —respondió fríamente.
— Otoño… —dijo al mirar detenidamente las paredes—. Podemos llevarla fuera y luego ejecutarla, no será en su territorio, no debería importarle. —dijo Anubis observando ansiosamente su cuello, mientras saboreaba sus colmillos.
— Ve con Otoño, nada bueno saldrá de hacerla esperar, me ocuparé de ella. —dijo mirando directamente a los inexpresivos ojos de Laher.
Anubis aceptó su propuesta y sin ninguna queja se marchó.
— Vamos a tener una conversación. —dijo aún mirándola fijamente.
[Alerta: la restricción de comunicación ha sido anulada.]
Justo ahora podría llamar a sus amigas y pedir ayuda, y lo hubiese hecho si no estuviera baja influencia. Pensando lógica y precisamente dedujo que estaba fuera de peligro y una conversación tal vez le ayude a recolectar información de alguna manera.
— Responderé tus preguntas, si tú respondes las mías. —dijo inexpresivamente.
— No entiendo por qué ustedes le interesan, realmente nunca lo entiendo, es difícil saber lo que piensa aún cuando suele compartir sus planes.
— Sabemos quiénes son y qué hacen, vamos a exponerlos y destruiremos su organización en la realidad. —dijo aunque no era su verdadera intención, sólo quería conocer su respuesta, todavía no estaba segura, pero había cambiado de parecer.
— Están jugando un juego donde él hace las reglas, se acercaron a nosotros siguiendo pistas repartidas por nosotros, están bailando entre sus manos… Y su objetivo ¿Cuál es? ¿Venganza? Están persiguiendo una organización criminal por un capricho. Realmente son niñas que no entienden la realidad… Disponemos de suficiente información para deshacernos de ustedes en cualquier momento, pero de alguna forma han ganado suficiente importancia como para que Hades las proteja de él.
Era justo lo que esperaba escuchar para reafirmar su seguridad, ahora estaba más segura de que quizás la mejor opción será olvidarse del acontecimiento y proseguir por caminos separados.
— Otoño, me habló de él y su influencia, igualmente, me habló de sus integrantes y todo lo que han hecho hasta ahora para mantenerse anónimos… Supongo que, lo más sensato será convencer a mis compañeras de alejarse de ustedes, aunque no será una fácil tarea.
— No pienso que puedan irse así no más, al fin y al cabo están por alguna razón dentro de sus planes. —dijo y la liberó.
— Está no será la última vez que nos veamos. —dijo Laher, y ambos continuaron su camino.
***
Luego de regresar a su base pasó cierto tiempo ordenando sus ideas y creando un elaborado mapa conceptuar con toda la información que disponía…
— ¡Finalmente está listo! —dijo creyendo estar emocionada.
Todavía le restaban alrededor de treinta minutos antes de que pasara el efecto, por lo que las contacto, obligándolas a venir lo más pronto posible, no sería bueno enfrentárseles sin pruebas contundentes.
Súbitamente aparecieron como destellos gemelos, emocionadas por el mensaje que les había enviado.
Empezaron a bombardearla con preguntas, dudando de sus resultados. Sin embargo, ni siquiera se inmutó y las obligó a sentarse y prestar atención.
— Aquí empezó todo. —dijo señalando el primer acto del mapa conceptual, que justo hizo aparecer con sus primeras palabras—.
Te entrometiste en una batalla innecesariamente y aún después de conocer la situación y su peligro, seguiste adelante por mero capricho. Provocando los acontecimientos siguientes “Hackeo”; fue su manera de defenderse de ustedes, no fue un ataque. Únicamente borraron la información que habían obtenido de ellos…
Bagael, interrumpe bruscamente.
— ¡Me estás culpando de todo, sólo hice lo que tenía que hacer!
— No, no lo hiciste, sabes lo peligroso que podía ser, y lo fue. Tú irresponsabilidad acarreó consecuencias. —dijo mientras ella trataba de interrumpirla nuevamente, provocando la intervención de SunShine.
— En lugar de olvidarlo y reflexionar, ¿Qué hicieron? Buscaron información para realizar un nuevo ataque. ¡Atacamos a quienes sólo se defendieron de nuestra intervención! ¿Luego qué? Descubrimos el peligro que representaban “VíctorXD”. —dijo señalando el tercer paso, el informante—.
— ¿Qué pasó con tu acento? —preguntó SunShine, observando su estatus, momento en que Bagael, también lo notó—.
— Ya llegaremos a eso, está justo al final. No interrumpan, me queda muy poco tiempo.
Trampa”, les tendimos la más simple y estúpida trampa, sin siquiera pensarlo racionalmente, aunque me opuse, no hicieron caso y pasaron sobre mí. ¿Para qué? Para enterarnos que ya nos estaba esperando y obviando el combate pidió que nos alejáramos de él y para ello nos amenazó con información que había obtenido a través del hackeo…
Bagael, vuelve a interrumpir, pero está vez SunShine, no interviene.
— ¡Tú amigo tenía información confidencial de nosotras y nuestras familias! ¡¿Qué esperabas, qué nos quedáramos de brazos cruzados?! —dijo al levantarse bruscamente—.
— Información que mantuvo en su poder durante tres días sin hacer uso de ella. Sólo la usó como contramedida para que nos alejáramos y evitar el combate…
Además si tanto te importa la familia ¿por qué no contactaste con la policía para informa sobre el hackeo? Tampoco tú lo has hecho SunShine, tú que tienes mayores posibilidades. No, lo que hicimos fue empezar una pelea dentro de un video juego como si eso fuera a resolver algo…
La brillante idea que tienen ahora es enfrentarlo en la realidad, solo ustedes dos. —dijo mirándolas fijamente con su inexpresivo rostro, lo cual les molestaba, mucho—.
— ¡Estoy jarta de esto, yo me largo! —gritó furiosa Bagael—.
— No puedes, aún no he terminado, deja de ser tan irracional. A mí sí me importa mi familia, tú la estás poniendo en riego innecesariamente; y tú no haces más que apoyar sus estupideces. —dijo mirándolas fijamente con su inexpresivo rostro, haciéndolas enfurecer—.
Bagael, enfurecida caminó hasta ella.
— ¡Laher! Creo que deberías detenerte. —dijo SunShine, tratando de ocultar su furia apretando fuertemente los puños—.
— Si lo que buscas es enfurecerme, lo has logrado. Apuesto a que estás dispuesta a pelear conmigo. —dijo furiosa mirándola a los ojos justo frente a frente—.
— Deja de actuar como una niña rebelde, no puedes resolverlo todo peleando…
Súbitamente, Bagael, le dio un bofetón en su inexpresivo rostro… Rápidamente, SunShine, se acercó a detenerla.
“En mi país se le dice galleta al (bofetón), sí justo como las que se comen. Pero supongo que no todos entenderán…”
— ¡Si eso es lo que piensas de nosotras, entonces, no te necesitamos…!
Decía furiosamente, hasta que Laher, le respondió con otro bofetón…
— Sí me necesitan, ustedes son parte de mí familia y sin importar lo que pase, voy a evitar que resulten heridas por una estupidez como esta. ¡Ahora siéntense y escuchen lo que tengo que decir! —dijo mientras, Bagael, levantaba lentamente el rostro—.
Bagael, no dijo una palabra y se alejó…
SunShine, no sabía cómo detenerla, estaba sumamente preocupada y no sabía que decir… Sin embargo, contra todo pronóstico, Bagael, regresó a su asiento.
Cruzando los brazos y piernas, mostró su desaprobación. SunShine, no sabía que estaba pasando, por lo que también regresó lentamente a su asiento.
— Si no te conociera diría que estás sonrojada. —dijo esbozando una pequeña sonrisa—.
— ¡Cállate! —dijo y escondió su rostro—.
Ella también estaba furiosa, pero no podía evitar pensar que Laher, debía tener razón. Aparte, era la primera vez que se enfrentaba a ellas de esta forma.
Suponía que tenía todo que ver con ese estado que la hacía inexpresiva, por lo que no confiaban totalmente en sus palabras.
Laher, prosiguió y les contó todo lo que había pasado, de dónde había sacado la información, como conoció a la regente de las hadas, su conexión con Tártaros y su último encuentro con ellos en la entrada de la iglesia.
Su encuentro con Otoño, la hiso dudar mucho de sus actos, pero las pocas palabras que compartió con Masamune, le hicieron tomar la decisión de alejarse de todo esto y se dispuso convencerlas de hacer lo mismo.
Segundo después de terminar, también terminó la influencia de Otoño, sobre ella, momento en el que SunShine, le preguntó acerca de todo lo que había dicho.
Porque muchas veces trató de deshacer la influencia, pero, ni si quiera su poder o influencia como líder de gremio estaban al nivel.
Por consiguiente, no confiaba mucho en sus palabras, ya que podría haber sido una manipulación.
— Yo creo firmemente en todo lo que dije, no poique Otoño, me lo haya pedido. Lo hice poique era lo que reaimente quería decii, pero no tenía ei valoi. —dijo algo preocupada, pero decidida—.
— Supongo que tienes razón… Creo que nos dejamos llevar de la emoción, tal vez, lo mejor sería olvidarlo… Quizás deberíamos enviarles un mensaje de tregua. —dijo indecisa sobre que debían hacer—. Aunque eso no quiere decir que no voy a averiguar cómo obtuvieron toda esa información… ¡Alguien se las verá conmigo!
— Bagaei, yo lo…
Bagael, interrumpe bruscamente.
— ¡No te disculpes! Yo no lo haré. Hiciste lo que tenías que hacer. Sólo digamos que ganaste esta vez, pero no vuelvas a decir lo que dijiste. —dijo muy calmada y fríamente, tal vez, demasiado—.
—Voy a enviarle un mensaje a ese idiota para notificarle nuestra decisión. —dijo para romper la incómoda tensión entre ellas—.
Oye Idiota, Nos Retiramos De Está Ridiculez… Espero Por Tú Propio Bien Que No Hagas Nada Raro Con Nuestros Datos O Te Aplastare En La Realidad.
Está No Es Una Amenaza, Es Un Consejo Que Más Te Conviene Seguir.
Atte. SunShine!
— ¿No crees que eso fue demasiado? —preguntó Laher, un tanto preocupada—.
— Eso es suficiente, le enseñará que no le tenemos miedo, pero que no estamos dispuestas a seguir con su juego. —dijo Bagael—.
Cinco minutos después recibieron una respuesta.
“Bien Pensado Niñas, Tomaron La Mejor Decisión. Aceptamos Su Rendición Como Muestra De Nuestra Superioridad Y Victoria, Por Lo Que Nos Mantendremos Al Margen.
Posdata: No Olviden Que Nos Dedicamos A La Venta De Armamento De Excelente Calidad, Pueden Solicitar Nuestros Servicios En Cualquier Momento Para Mejorar La Fuerza De Su Clan.
O Pueden Consultar Nuestros Demás Servicios En Cualquier Iglesia Del Polvo Estelar, Sólo Digan Que Las Envía Hades, Y Pueden Obtener Un Descuento En Su Primer Servicio.”
Atte. Tátaro Team.
— ¡Ese idiota se está burlando de nosotras! ¡Debí quemarlo hasta las cenizas! —dijo furiosa mientras veía el mensaje—.

Después de unos minutos el mensaje desapareció tan extravagantemente como lo hicieron sus predecesores.

— Quizás no sea tan mala idea comprarle algo, a ver qué es lo que tiene para ofrecer. —dijo Bagael, con una incómoda sonrisa que ocultaba su disgusto—.

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