Capítulo 4: Tártaros


Capítulo 4: Tártaros


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Después de la explosión, las tres estaban agotadas, habían gastado todo su MP y su nivel de Fatiga estaba por encima del 85%…
Sin embargo, habían ganado, se recostaron juntas sobre la poca grama que quedaba, mientras todo se disipaba y la oscuridad de la noche tomaba su lugar, sonrientes observaban el estrellado cielo nocturno, pero…
Un fuerte y violento rugido, las alarmó, asustadas se incorporaron torpemente y se encontraron con que el nombrado jinete fantasma, había despertado.
El jinete fantasma; es un gigantesco centauro, con un fornido y casi transparente cuerpo, llevaba una armadura oscura con símbolos de truenos, un gran arco en la espalda y un imponente mazo, tenía cabeza de león y un único, pero gran cuerno en medio de la frente. Rodeado por una densa niebla que salía desde sus enormes pesuñas, congelando todo a su paso.
Un formidable enemigo de nivel 50, aunque su nivel estaba por encima de él, necesitarían estar en plena condición para tener una oportunidad.
Por lo que la bestia era demasiado para ellas, por eso se movieron torpe, pero cautelosamente listas para marcharse antes de ser víctimas de su rango de visión, de lo contrario iban a perecer allí.
Sin embargo… A la distancia, más allá del jinete, vieron sus tres enemigos, salir ilesos de entre las sombras…
Atónitas esperaban ver qué sucedería de ahí en adelante, pero ellos simplemente dieron la vuelta como si no las hubiesen visto, con excepción de Anubis, quien se despidió con una pícara sonrisa, provocando la furia de ellas tres.
Estaban dispuestas a atacarles, pasando por encima del jinete, solamente por la furia que sentían…
No obstante, una cuarta silueta apareció junto a ellos y luego desaparecieron todos juntos. A través de un sello mágico que se iluminó antes de desaparecer, atrayendo la atención del jinete.
Desconcertadas y molestas, decidieron escapar antes de convertirse en presas del jinete…
***** 
De regreso en el gremio.
―Vamos a entregarlos, tenemos pruebas suficientes para entregarlos. ―dijo Bagael, un tanto molesta ya que su venganza no pudo ser completada.
―Solo tenemos el video y la foto, podemos acusarlo a él, pero que pasará con el Tecnópata y el resto de sus amigos. ―dijo SunShine, mientras se mantenía de pie al lado de su asiento.
―Es suficiente con eso, el otro debe ser su jefe o algo, incluyendo a los demás deben ser un intento de organización clandestina, sí tenemos a uno puede que nos ayude a atrapar a los demás… ―Bagael, hiso una pausa para recordar acontecimientos similares―. Ese tipo de persona vendería a sus amigos únicamente para no hundirse solo. ―dijo mientras pensaba en basa a la información que disponían.
―Poi qué no dejamos las cosas como están y nos oividamos de ellos, poi si peitenecen a aiguna oiganización peligrosa. ―dijo un poco preocupada, tomando una de las sillas para sentarse, aunque permaneció de pie.
―Estás bromeando, voy a delatar a ese idiota y haré que venda a sus amigos. ―dijo SunShine molesta, mientras revisaba su biblioteca multimedia, moviendo hiperactivamente sus manos de un lado al otro.
En ese momento notó que toda la información que creían poseer había sido borrada y en su lugar había una única imagen con las siguientes palabras:
‘Deberían contratar un mejor proveedor de seguridad’. Atte: Hades.
―¡Maldición! ―gritó furiosa SunShine, asustando a las demás.
Después de lamentarse furiosamente les mostró que habían perdido toda la información que creían poseer.
Furiosas permanecieron las dos durante un buen tiempo, puesto que no encontraban cómo desquitárselas, pero a Laher, eso le tranquilizaba ya que pensaba que esa información podría meterlas en un gran lio… No obstante, Bagael, de pronto empezó a sonreír.
―Vamos a atraparlo en la vida real, conocemos su rostro, estoy segura de que debe ser un estudiante de aquella escuela pública. ―dijo recordando cómo empezó todo en primer lugar.
―¡Tienes razón! ―dijo captando la idea SunShine―. Podemos buscar en el registro de estudiantes, apuesto que allí lo encontraremos. ―dijo sonriendo, mientras apretaba el espaldar de la silla con sus delicadas manos.
―¿Cómo van a conseguir ese registro? —preguntó Laher, con la esperanza de que no pudieran hacerlo y renunciaran.
―Existen muy pocas cosas que mi influencia no puede conseguir. ―dijo sonriendo SunShine y empezó a buscar en su lista de contactos alguien que pudiera hacerlo.
Luego de un par de horas de espera recibieron aquello que anhelaban, un registro completo con datos de profesores, personar y estudiantes del año escolar en curso.
Sin demora comenzaron a escudriñar los datos, pasaron horas y horas, hasta tarde de la noche buscando… Hasta que finalmente dieron con Hades, estudiante del 4to de bachiller, estaban seguras de que era él, aunque era difícil reconocerlo a simple vista.
―Lo tenemos, vamos a acusarlo, haremos que lo arresten. ―dijo SunShine con su clásica risa de niña rica.
―Espera, como haremos eso, no tenemos pruebas que puedan inculparlo, necesitamos pruebas. ―dijo Bagael, antes de que SunShine hablara con alguno de sus contactos.
―Bagaei tiene razón, no pueden simplemente decir que fue éi, si no pueden comprobailo. ―dijo preocupada.
―Entonces qué, nos quedamos de brazos cruzados… No lo creo, puedo hacer que él y su familia atraviesen por un infierno con solo una llamada, eso será suficiente para que confiese. ―dijo, registrando su lista de contactos buscando al indicado para el trabajo.
―No, no podemos involucrar a su familia en esto, que pasará si no están conscientes de sus movimientos ilegales… Tengo una mejor idea, vamos a ir a su escuela y lo emboscaremos. ―dijo Bagael, lo cual no les parecía una buena idea a las demás.
―Esa es la peoi idea que has tenido. ―dijo preocupada.
―Laher tiene razón, no creo que sea una buena idea, podría ser peligroso. ―dijo preocupada.
―No, no lo es, iremos al mundo real donde él no tendrá poderes, pero tú sí… Piénsalo, podemos cogerlo de sorpresa y si escapa al limbo aún tendrás la ventaja. ―dijo, con la esperanza de convencerla.
―…
―Bien, iremos mañana y lo atraparemos después de clases… Laher, tú no puedes ir, así que tienes que estar al tanto de nosotras en todo momento por si algo sale mal. ―dijo SunShine, después de pensarlo bien, aunque Laher, seguía repitiendo que era una mala idea.
―No fueron ustedes que dijeron que éi tenía muy buenas aimaduras y que debía sei aiguien rico y con muchos contactos… Creo que aceicaise a éi es muy peligroso. ―dijo, puesto que aún seguía preocupada y desconfiaba totalmente de sus razones para actuar.
―Yo también soy rica y poderosa, no olvides que hay un numero limitado de personas que puede superar mi autoridad en todo el país. ―dijo sumamente orgullosa de su estatus social.
―¿Qué tai si entre ellos hay aiguno de esos? ¿Qué pasa si peitenecen a aiguna oiganización criminai a nivei nacionai, o inteinacionai? ¿Qué pasa si trabajan para aiguien muy influyente que usa ei limbo pa’ maidades o crímenes o… o…? ―dijo sumamente preocupada, tratando de hacerlas entrar en razón.
―No crees que estás exagerando, hablas de conspiraciones y organizaciones criminales como si del bajo mundo, el mercado negro o de la Dark Web se tratara, estamos hablando del limbo, llevamos tiempo tratando en él y solo hemos conocido 7 personas que pertenecen a él, no creo que de repente vaya a aparecer una organización criminal internacional de la cual nunca escuchamos hablar, además no puede ser que de las pocas personas que ostentan una mejor posición social que SunShine, sea nuestro adversario… De ser así no lo hubiese encontrado en el lugar en el que estuvo, solo piénsalo. ―dijo, mientras pensaba que ella estaba exagerando.
―Pero tú también estabas en ese lugai muy lejos de tu casa ¿Poi qué estabas tú allá? Además, si estoy exagerando ¿Cómo es qué logró hackiainos a las tres? —preguntó todavía sumamente preocupada.
―Solo estaba pasando por allí, saben que me gusta caminar… Quizás el Tecnópata para el que trabajan es muy buen hacker, no hay que ser rico ni influyente para eso o para contratar una bueno, el hackeo es el delito más común en estos días, estás demasiado paranoica. ―dijo totalmente calmada.
―Esto no nos lleva a ningún lugar, no debemos discutir entre nosotras, hay que ver todo desde un punto de vista más objetivo, en primer lugar, el limbo es un lugar muy poco conocido entre las personas y al que muy pocos pueden acceder, de modo que no creo que nos vayamos a topar con una organización criminal u algo por el estilo, lo segundo es que no sabemos que es el limbo, ni la relación que tiene con The Legend Of Lost Time, en particular ya que existen miles de juegos similares y solamente tiene conexión con este, y por último es mejor enfrentarlo en la realidad ya que contamos con algo que el no tiene y no hablo solamente de mis maravillosas influencias, sino de nuestras habilidades naturales, por ende la realidad es nuestra mejor opción. ―dijo SunShine para concluir la discusión.
—Poi qué no usas tus influencias para enviai a aiguien que haga ei trabajo, como lo que ellos hicieron con ei Víctoi ese, en lugai de ii(ir) ustedes o y si tiene habilidades naturales… Es una mala idea. ―dijo oponiéndose firmemente a sus ideas.
―Eso no importa, siempre que nos apoyes todo saldrá bien. ―dijo pasando por alto toda su preocupación, al final sólo le interesaba vengarse.
―Ya saben qué hacer. ―dijo SunShine antes de desconectarse, obviando la preocupación que estaba empezando a sentir.
—Aunque no lo creas si tomamos en cuenta lo que dices. —dijo antes de desconectarse.
Sin embargo, Laher estaba muy molesta con las dos porque no le dieron importancia a sus advertencias… Permaneció unos minutos sola en el gremio antes de desconectarse.
 *****
La mañana siguiente Laher, despertó antes que los primeros rayos del sol y empezó una inmersiva investigación, no de Hades, sino de sus compañeros ya que él era todo un misterio que persiguió por meses sin resultados concretos.
Minuciosamente registró todos los blogs y páginas dedicadas al juego. Ni siquiera se había movido de su cama, ha estado allí sentado por más de dos horas, buscando y preguntando.
Había muchos jugadores que decían conocerle y otros aseguraban que trabajaban para él… Había mucho ruido de fondo y desinformación, su investigación no estaba rindiendo frutos.
Se sentía frustrada, hasta que recibió una respuesta de uno de sus proveedores de información, asegurando poseer información relacionada a él.
Rápidamente le pidió que se la enviara, pero él se negó con el pretexto de ser información demasiado valiosa, obligándola a acceder al juego para que pudieran encontrarse.
Laher, se dirigió a la enorme ciudad Ágata, siendo esta la tercera más grande de reino de Roxy, de las grandes ciudades es la más cercana a la cueva de las maravillas.
Reconocida ampliamente por sus minas de diversos materiales esenciales para todo tipo de construcción, sus minas se extienden por la cordillera del mismo nombre.
La mitad de sus edificaciones se encuentran en el pie de una enorme montaña y la otra mitad recorre la montaña completamente perteneciendo esta otra a los habitantes de mayor estatus social.
Sus edificaciones al igual que sus enormes murallas están construidas con dicho material, dotándola de pintorescos colores aunque predominan las tonalidades de marrón y rojo, sin embargo, ciertas edificaciones importantes constan de tonalidades más destacadas como verdes, azules y morado.
En la punta de la montaña se yergue el deslumbrante castillo púrpura, morada del monarca dirigente de estas tierras, la infraestructura de la ciudad está basada en tranvías y teleféricos.
Como era de esperarse de un lugar tan prospero, estaba repleto de aventureros y NPCs yendo y viniendo en todas direcciones, establecimientos comerciales con todo tipo de herramientas, armas, armaduras y mucho más a la venta.
Sin embargo, ella ya estaba acostumbrada al entorno, por lo que después de llegar a través del portar de tele transportación, se dirigió al bar de mala muerte donde siempre se encontraban.
Después de recorrer el bajo mundo y llegar al bar el cual su nombre era, literalmente “Sin Nombre”, algún capricho del dueño, siendo para ella al principio gracioso, pero ya había perdido el sentido.
El lugar continuaba tan ruidoso como la última vez, apenas entró y el encargado le hiso señas para que se dirigiera al cuarto de reunión, claramente su contacto la estaba esperando.
El lugar de reunión no era otro más que el almacén de licores y comida, había una simple mesa de madera, un par de silla, y la itinerante luz de una sola bombilla que apenas si lograba iluminar parte de la habitación, el piso de madera rechinaba con cada paso.
Al otro extremo se encontraba el informante, recostado de los barriles de licor, con un sombrero vaquero negro que tapaba su rostro, una pequeña capa sobre su hombro izquierdo, vestimentas de cuero negro y algo de metal, botas vaqueras, un revolver enfundado en su muslo derecho, en la izquierda una bolsa en la que debía guardar municiones. Correas de municiones varias recorrían su cuerpo. Un arma de asalto en el lado derecho de su espalda y un rifle láser en la izquierda.
(Nick Name: Betto, Raza: Humano,  Nivel: 66, Clase: Pistolero, Título: Donde Pone el Ojo, Pone la Bala, Gremio: Game Over, Posición: Miembro)
[Advertencia: este usuario es buscado por diversos crímenes en la ciudad Nube, recompensa por su captura $5,000 monedas de oro, comunicar cualquier información con la Guardia Real y al gremio Relámpago.]
[Advertencia: si eres vista con el usuario en cuestión por un miembro de la guardia real o el gremio Relámpago podrías ser confundida con su cómplice.]
—Estás metido en problemas otra vez. —dijo al ver los mensajes de advertencia en su pantalla.
—Ya sabes como es este trabajo, algunas veces tus propios clientes tratan de engañarte… —dijo mientras levantaba la vista dejando ver su rostro, poco expresivo, piel canela y áspera, y una mirada difuminada—. Y bueno sabes el resto, ¿Cuánto es y quienes me buscan? —preguntó al sentarse en una silla y subir sus botas sobre la mesa.
[Cuando un PJ, es Fichado o Buscado, este no tiene acceso a la información en respecto, además ciertos servicios le son negados por ciertos NPCs aunque algunos son susceptibles al soborno y chantaje. También existen objetos y equipamientos que pueden ocultar su
identidad.]
—Dos mil más que la úitima vez, tu antiguo gremio y la guaida reai. —respondió mientras tomaba asiento en una de las rechinantes silla.
—La fianza es solo tres mil monedas más, quizás la pague, será más costoso pasar tres meses viajando clandestinamente en lo que retiran el cargo. —dijo mientras observaba un mensaje con los datos en su pantalla.
—No vine aquí poi eso… —Ya lo sé, no empieces. —dijo al interrumpirla bruscamente.
—Recuerdo muy bien, dijiste haber abandonado el caso un par de semanas atrás, pero aquí estás de nuevo tras la pista de Hades… Quisiera saber por qué regresaste, pero sé que no dirás nada. —dijo con una mirada inexpresiva.
—Dame 5 Flores, por la información y como regalo te dejaré usar mi código está vez. —dijo aún inexpresivo.

[Flor: una criptomoneda no muy famosa, ni muy costosa, codiciada por algunos y despreciada por muchos otros. Cuyo logo es la Flor de la Vida, de ahí su nombre.]
—Te daré ei equivalente en la moneda dei juego u otra cripto, pero no tengo flores. —respondió tranquilamente.
—El precio no es negociable, sé que tienes. —respondió mirándola a los ojos. —Te daré 25 Soles, ei triple dei valor. —respondió inexpresivamente.
[Sol: otra criptomoneda.]
—Tentador… Pero necesito flores, es mi única oferta. —dijo reafirmando su posición.
No estaba dispuesta a ceder, pero necesitaba la información, aparte estaba un poco desesperada porque tenía el tiempo encima.
—Espero no me defraudes. —dijo mientras accedía a su cartera para hacer la transferencia. —Nunca lo he hecho. —dijo, mientras confirmaba la transacción en su billetera.
—No sé nada de Hades, pero conozco a su mano derecha, un ninja con extrañas habilidades de clonación llamado Masamune, aunque en aquel entonces era solo nivel 57, logró vencerme aun estando cinco niveles por encima de él. Deberías tener cuidado con él, es sereno, callado e inexpresivo, no querrás toparte con él. Es un Capturador de ,  muy famoso, también trabaja como mercenario y asesino en el bajo mundo… También escuché de una poderosa Condesa de Sangre Pura, pero es solo un rumor… Este tipo se junta con gente peligrosa, no sé qué quieras de él, pero si busca la recompensa que hay tras de su captura vas a necesitar del monstruo de tu gremio y todos los amigos que puedas encontrar.
[Capturadores: personajes que trabajan cazando PK plajers, un trabajo que cualquiera podría realizar, pero muy pocos se destacan en ello.]
—No crees que estás exagerando, solo he escuchado de tres Capturadores de 7º, tai vez no sean más que rumores… ¿Además de eso qué más tienes? —preguntó ya que no podía creerle, después de lo que había pasado con ellos. Aunque conociendo sus habilidades, era difícil creer que haya perdido.
—Si crees que estoy exagerando, revisa a ver quién completó de la Mansión Embrujada. —dijo con su inexpresivo rostro.
[La Mansión Embrujada: fue una misión especial de nivel 60, catalogada como una de las más difíciles hasta la fecha, estuvo en vigencia durante una semana, hasta que repentinamente fue completada por un usuario desconocido]
Laher, revisó la lista de misiones completadas hasta que la encontró, allí pudo ver sus nombre, Hades (50), Masamune (55), Anubis (55) y un usuario desconocido. Sus niveles durante ese tiempo estaban por debajo del nivel recomendado para la misión (60), por lo que rápidamente asumió que el usuario desconocido debía ser el Tecnópata y también que debía ser muy poderoso, tanto así como SunShine.
—No puedes ver que él está dentro de esos cuatro porque aún no lo conoces personalmente, pero yo puedo verlo claramente. —dijo porque sus datos están ocultos y únicamente los usuarios que le conocen personalmente pueden tener acceso a ellos.
—Por lo que sé pertenecen a una organización clandestina llamada Tártaros. No son muy famosos en el bajo mundo, aunque en esas áreas laboran, lo cual los hace peligrosos. —dijo mientras abría su inventario.
—¿De dónde sacaste toda la infoimación? —preguntó un poco asombrada, porque trató de hacer lo mismo por meses.
—El Polvo Estelar, es la única manera de obtener información de ello, también puedes contratarlos para trabajos clandestinos. —dijo mientras sacaba un pequeño huevo de cristal con un pequeño bonsái de hojas rojas y amarillentas dentro de una nevada.
—Hablas de la iglesia de las Hadas, esas que comerciantes que crean herramientas por encargo. —preguntó intrigada, mirando el huevo.
—Esas mismas, si quieres saber algo más puedes llevarle eso, es todo lo que tengo de ello. —dijo mientras le entregaba el huevo.
—Sigues sin defraudaime. —dijo mientras tomaba el objeto.

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